Sunday, April 03, 2011

Hago un llamado a cooperar


Hoy visite “El Santuario de Animales San Francisco de Asis” en Cabo Rojo, y déjenme decirles, salí con el corazón hecho pedazos. El Santuario, como dice su nombre se encarga de darle un hogar digno hasta el ultimo día de sus vidas a perritos y gatitos que han corrido con la desdicha de ser maltratados, torturados y abandonados a sus suerte, algunos de ellos allí mismo en los portones del Santuario. Al hablar con Nayda, la encargada del lugar, mientras nos mostraba “las facilidades” (que no hacen el trabajo nada fácil ya que es una estructura abandonada que no cuenta siquiera con instalación eléctrica) mi esposo Nelson y yo nos dimos cuenta de lo afortunadas que eran nuestra mascotas, pero también nos dimos cuenta de lo despreciable que puede llegar a ser la raza humana. Nosotros llegamos allí a hacer una donación ya que tarde en la noche WORA televisión paso un anuncio “a las millas de chaflán” hablando de las necesidades de el albergue y nosotros decidimos emplear nuestro sábado en llevarle comida a los animalitos. Una vez allí nos dimos cuenta que lo que creímos un gran donativo, era solo un granito de arena en el desierto, pues las bolsas de 50 y 20 libras de comida de perro y gato solo abarcarían la comida de un día. El santuario alberga alrededor de 120 perros y 80 gatos, no tienen servicio de energía eléctrica ni de agua potable así que operan a base de plantas eléctricas y cisternas. Debido a la naturaleza del trabajo que hay que hacer y de la enseñanza materialista de nuestro país, no solo carecen de recursos sino de manos voluntarias que ayuden con labores tan básicas como alimentar y bañar a los animalitos y aun asi dan la milla extra para que los animalitos tengan calidad de vida. La experiencia fue fuertísima para mí ya que adoro a los animales y me revienta el hígado ver un pobre animalito indefenso sufrir, pero también me enseño que hay gente con corazón, con dignidad y con humanidad que donan de su tiempo y dinero para ayudar a los que lo necesitan. A pesar de las manos amigas que ayudan en el lugar, la labor es grande y hacen falta mas almas caritativas que estén dispuestas, especialmente los fines de semana. Mi propósito con esto es hacer un llamado a la compasión y pedirles que compartan un poco de lo tienen, hasta lo mas mínimo ayuda, una latita de comida de perro o gato, un galón de clorox, bolsas de basura, una o dos horas de tu dia que tengas disponibles, los periódicos que votas, etc. Por favor, mira dentro de tu corazón y reflexiona sobre lo que tienes y luego piensa en los que no tienen lo que tú y en lo que puedes hacer por ayudarlos.

Los donativos pueden ser llevados directamente al Santuario o en su pagina de internet http://www.sasfapr.org/ podras encontrar las distintas maneras en las que puedes contribuir. Hasta por el servicio de pay pal puedes ayudar si el donativo es monetario (que también ayuda muchísimo para esterilizaciones, cuidado médico de los animalitos enfermos, comprar comida, gasolina para las plantas eléctricas, etc.) que ni siquiera tienes que poner un pie en Cabo Rojo para contribuir.

Te hago un llamado a compartir un poco de tu pan, te aseguro que te será multiplicado en bendiciones.